Las obras de escollera están constituidas por bloques pétreos, obtenidos generalmente mediante voladura, con formas más o menos prismáticas y superficies rugosas.
Se pueden distinguir los siguientes tipos de escollera, en función del método de puesta en
obra.
- Escollera vertida.
- Escollera compactada.
- Escollera colocada.
Sus aplicaciones fundamentales son las que siguen:
- Escollera vertida: Dentro del campo de la ingeniería civil se emplea fundamentalmente
en obras marítimas y fluviales, y en ciertos casos en presas y otras aplicaciones de tipo
medioambiental. En obras de carretera suele utilizarse en la construcción de mantos drenantes, en la resolución de patologías geotécnicas —deslizamientos, por ejemplo— que requieren peso estabilizador en una determinada zona, como cimiento de terraplenes sobre suelos blandos, etc. - Escollera compactada: De amplio uso en pedraplenes, presas y obras marítimas en general. Se obtienen parámetros geotécnicos, en general mejores que los obtenidos por
simple vertido. - Escollera colocada: Se utiliza en encauzamientos y restauraciones fluviales y en determinadas ocasiones en mantos de diques marítimos en talud. En obras de carretera se emplea como protección contra la erosión de las entradas y salidas de obras de drenaje y de las pilas y estribos de las estructuras de cruce de cauces, así como en contrafuertes drenantes, taludes vistos de pedraplenes de fuerte inclinación y muros de contención o sostenimiento.
Entre las principales ventajas que puede ofrecer la escollera colocada para la construcción de muros se encuentran:
- Facilidad de drenaje a través de los intersticios existentes entre los bloques pétreos.
- Facilidad para adaptarse a movimientos diferenciales del terreno, admitiendo ciertas distorsiones sin sufrir daños estructurales.
- Relativa facilidad de integración de la escollera en el entorno, al tratarse de un material natural.
Los parámetros geotécnicos que resultan con la escollera colocada son, en general, mejores que los obtenidos para el mismo material por simple vertido.
Los modelos de comportamiento de los tres tipos de escollera (vertida, compactada y colocada) son diferentes, aunque presentan algunos aspectos comunes. Históricamente los más analizados son los dos primeros, sobre los que la literatura técnica es relativamente abundante; así, existen numerosos estudios sobre el empleo de la escollera en presas de materiales sueltos, diquesrompeolas en talud y pedraplenes. Mucho más escasa resulta, por el contrario, la literatura disponible sobre la escollera colocada y en particular sobre muros.
El documento contiene 66 páginas, y se puede descargar “comprándolo” en esta tienda, ¡así de fácil!
Reseña del usuario
Se el primero en opinar sobre “Guía para el proyecto y la ejecución de muros de escollera en obras de carretera”

Guía para el proyecto y la ejecución de muros de escollera en obras de carretera
¡Gratis!
Aún no hay reseñas.